Presentación del Seminario Anual: La Metapsicología Freudiana –una investigación de los fundamentos de la clínica analítica-


Presentación del Seminario Anual:

La Metapsicología Freudiana – una investigación de los fundamentos de la clínica analítica- (*)

Por Lorena Danieluk.


Quisiera detenerme en un párrafo del texto que hemos presentado como fundamentación e hipótesis de lectura de nuestro seminario, donde planteamos, entre otras cosas, que el programa explora una especie de triangulación, entre los conceptos – los problemas de la práctica – y las políticas del psicoanálisis en lo contemporáneo.

Al respecto encuentro lo siguiente. Al leer los cinco artículos que componen la metapsicolgía freudiana, vemos incluidos allí lo siguiente: en primer término la hipótesis de lo inconsciente, consecuentemente la idea de la represión como mecanismo que permite pensar en la posibilidad de dicha hipótesis. Incluye también a la pulsión, la diferencia del instinto, la piensa como una fuerza constante que genera cierta dinámica en el aparato anímico. Introduce al sueño, y por lo tanto podemos pensar que todas las formaciones del inconsciente hacen a sus fundamentos. Menciona al duelo y la melancolía como dos estados clínicos en los que problematiza la teoría de la libido y la del yo, en tanto este último estaría investido libidinalmente – catectizado-. Los presuntos estadios entonces funcionarían como modo válido para pensar el recorrido de la libido a la vez que la constitución subjetiva como algo que difiere de un pensamiento evolutivo.

Hasta aquí tenemos conceptos que problematizan la clínica, incluso surgen de ella misma. Queda por decir respecto la política.

En relación a esto encontré lo siguiente:

Entre los años 1910 – 1013, los discípulos freudianos que habían acompañado a Freud y en quines había confiado la difusión del psicoanálisis, lo habían defraudado. Por lo tanto algunos de estos artículos metapsicológicos son para mostrar de que trata el psicoanálisis, por oposición a otras prácticas que no lo son. Precisamente en 1914, en su artículo “Contribución a la historia del movimiento psicoanalítico”, expone la expansión del movimiento psicoanalítico alrededor de 1902, pero que entre 1910/11 y en Munich en 1913 se iniciaron dos movimientos separatistas, dentro de las propias filas del psicoanálisis. Se ocupa de contestar a Adler y Jung, refiere que cada quien puede expresar y pensar lo que quiera pero no a presentar eso como algo diverso de lo que realmente es, vale decir no presentarlo como psicoanálisis.

En 1964, cuando Lacan dicta su seminario “Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis”, era un momento complicado para el, momento de la ex – comunión.

Es curioso encontrar aquí, algo similar a lo que acabo de relatar que aconteciera con Freud. Lacan dice que lo estaban negociando, precisamente quienes estaban en la posición de colegas y alumnos. Se trataba de ver hasta que punto la enseñanza lacaniana les permitía obtener la habilitación internacional de la sociedad.

Decide entonces, hablar de los fundamentos de lo que él designa una praxis, ¿Qué lo funda como praxis?. Ubica como elemento de la misma, la formación de psicoanalistas. Consecuentemente el deseo del analista no puede dejarse de lado. El análisis didáctico no puede servir para otra cosa que no sea llevarlo a ese punto.

Por lo tanto, se puede pensar que tanto en Freud como en Lacan, la introducción de aquello que fundamenta la práctica analítica, es consecuencia de una política que hace existir el psicoanálisis.

Espero entonces que el desarrollo de este seminario anual contribuya en tal sentido.

(*) Versión corregida y resumida de la intervención en la mesa de apertura del ciclo 2010 de la Asociación de Psicoanálisis de Misiones “El programa del psicoanálisis. Ciencia, clínica y política en lo contemporáneo”. Posadas, 31 de marzo de 2010.